Sorprende descubrir que desde el lejano 1983, Abou-Khalil lleva sirviendo especialidades libanesas en Santaló. Cuando la calle Verdi tenía sólo mercerías y talleres, ya se servían hommos y fatush. La historia es peculiar. Un estudiante de medicina que conquistaba a la facultad en sus cenas caseras y vio que alimentar era otra forma de mantenernos sanos. Discreto de entrada, es un lugar muy agradable, tranquilo y con unos preparados exquisitos. Los precios lo acompañan para convertirse en un obligado.No es de extrañar que la casa de salud se haya expandido en el Eixample con Al-Jaima.
Dónde: Santaló 88
Tel: 932018830
estoy de acuerdo con su diagnóstico.
ResponderEliminarA nivel estrictamente culinario no deja de ser bastante convencional, pero el precio, el lugar y el trato le convierten en visita obligada.